top of page

16 Festival Al Este: "I'm Not Everything I Want to Be" (2024): revelado rebelde

El Festival Al Este trajo este documental sobre la vida y búsqueda de libertad de una fotógrafa joven tras la invasión soviética en Checoslovaquia, construido únicamente a partir de las imágenes que logró capturar.


Por Gustavo Vegas Aguinaga                                          FESTIVALES / FESTIVAL AL ESTE

"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: Full Frame Documentary Film Festival
"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: Full Frame Documentary Film Festival

La cineasta checa Klára Tasovská rememora la vida llena de aventuras de la fotógrafa Libuše Jarcovjáková en un documental que destaca, desde el arranque, por sus imágenes: no se trata de escenas filmadas a través de una cámara de video, sino de una serie de cientos de fotografías montadas una tras otra. La misma Jarcovjáková es quien da su voz para la narración de sus memorias que, sumadas a sus fotos, le otorgan un fuerte aire poético a la película. Cabe señalar, como apunte muy personal, que se trata de fotos muy geniales que le dan un gusto extra a la obra. La narrativa biográfica y fotográfica del filme se ampara en la edición para mostrar ese espíritu libre de los 60s, así como la habilidad de una artista para hacer infinitos los instantes.


Tasovská logra, mediante un excelente diseño sonoro, dotar de una atmósfera muy real y natural a las secuencias de imágenes y transmite una sensación de cercanía, de vida. Hay mucha vida en las fotografías y no sólo por esto mencionado, sino porque abarcan décadas de experiencias de Jarcovjáková, desde la invasión soviética a Checoslovaquia hasta el presente. La cineasta y la fotógrafa colaboran mano a mano para que el relato se vuelva cada vez más profundo y atractivo, hasta simbólico. Por ejemplo, el momento donde Jarcovjáková comenta que le cerraron las puertas a la universidad y Tasovská empalma ese instante con una foto de la fotógrafa ante una ventana; es decir, encontrará la manera de vencer.


Entre las tribulaciones de una joven sin saber qué rumbo tomar para su vida, medita el rol de las mujeres en el arte mientras trabaja en fábricas. La directora continúa con las imágenes poderosas y, ante el relato de un encuentro sexual en el lugar de trabajo, coloca la fotografía de un corpiño colgado entre las máquinas para después suceder más fotos bajo un montaje repetitivo, desordenado y con mucho movimiento. Sexual. Lo mismo ocurre cuando la historia nos lleva hacia las fiestas underground de Jarcovjáková y la edición toma un ritmo rápido, frenético, con cuadros en negro para dar ese efecto estroboscópico de las luces de una juerga.

"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: IndieLisboa
"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: IndieLisboa

Cada foto de la protagonista nos lleva por lugares distintos y experiencias tanto positivas como trágicas. Nos cuenta también sobre los abortos que tuvo y cómo nunca se sintió lista para la maternidad. Su voz es acompañada por imágenes oscuras, de alto contraste y en clave baja que sugieren claramente el tono del momento. Tasovská emplea estos recuerdos para cuestionar la vida de la mujer joven y artista y cómo un proyecto de vida se ve afectado por un embarazo no deseado. Al mismo tiempo, Jarcovjáková no esconde pasajes de su vida adversos ni menos sus impresiones o su mismo cuerpo. Gran cantidad de las imágenes son autorretratos suyos y dentro de estos aparecen varios desnudos que se alejan de la erotización y se acercan más a la introspección.


De este modo, la película cobra bastante fuerza en la idea del selfie y cómo vamos construyendo una narrativa de nuestras propias vidas a través de las fotografías que tomamos (sobre todo en tiempos actuales con las facilidades tecnológicas). Al capturar a la gente que te rodea y los momentos que vives, se forma poco a poco una gran masa de recuerdos que, en este caso, Jarcovjáková reconoce como su vida. Es una autobiografía hecha a base de autorretratos que marcaban su sentir en diversas épocas de una vida llena de periplos. De Checoslovaquia a Japón, de Japón a Berlín y más. La vida de la fotógrafa se vuelve más llamativa, claro, por sus fotos, pero también por sus vivencias bohemias y nómadas. No son selfies cualquiera, sino capturas progresivas del deterioro psicológico de una artista que tuvo que salir de su hogar (casa y país) para perseguir su sueño.


En esta línea, se siente muy bien logrado el momento en el que por fin puede ingresar a la universidad, pues el documental presenta imágenes teñidas de rojo con flashes y bastante luz, como si de un revelado se tratase. La fotógrafa rebelde sale a la luz y al mundo, logra una emancipación artística que añoraba y se prepara para otra etapa de su vida. La universidad, sin embargo, no duró mucho. Entre otros encuentros sexuales conoce a un hombre con el cual se casaría, pero el matrimonio tampoco duró mucho. Son estos fracasos profundos los que llevan a Jarcovjáková hacia Japón. Si su vida en Checoslovaquia estaba condenada a fotos hundidas en la depresión, quizá en Asia encontraría imágenes más acogedoras.

"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: KVIFF TV
"I'm Not Everything I Want to Be" (2024). Fuente: KVIFF TV

Las fotografías continuaron su rumbo triste, pues Japón no le fue leve a la protagonista. Al poco tiempo quedó abandonada, de hospedaje en hospedaje y con trabajos esporádicos. En uno de estos vaivenes halla un personaje que le da esperanza sobre el futuro. Vemos una foto de un brazo que se estira hacia la nada en la oscuridad, como si Jarcovjáková buscara atrapar algo que no está o no existe. No será hasta el final donde regresa a su hogar y vemos una imagen muy similar donde la mano se extiende hacia la luz, una figura prometedora sobre los tiempos venideros.


Entre tanto, Tasovská se da el tiempo para señalar las problemáticas que se encontraba Jarcovjáková con respecto a las difíciles situaciones de los migrantes (fue una ella misma) y de la población LGBTQ+ en los clubes nocturnos que frecuentaba. Sus fotografías retratan con inmenso cariño pero también honestidad las vidas alternativas de estas minorías muchas veces desfavorecidas. Se establece así un diálogo con los tiempos actuales donde hoy, por ejemplo, en Estados Unidos se legisla en contra de la población queer y trans, así como se persigue violentamente a los inmigrantes.


“La vida pasa muy rápido y la única forma de sobrevivir es tomando fotos”, comenta Jarcovjáková. Volvemos a la idea del selfie. Es una manera de vivir, de existir, de manifestarse y conectar. Es también una forma de forjar la identidad y la memoria. Ante una vida tan cambiante y veloz, no queda otra que inmortalizar los instantes y así Jarcovjáková roza la eternidad. Vemos en los últimos minutos un montaje hermoso y sensible que establece una suerte de línea de tiempo a partir de autorretratos que van desde lo analógico a lo digital, del blanco y negro al color, de la juventud a la vejez, de no saber quién es a seguir sin saberlo, pero yendo siempre hacia adelante y siempre tomando fotos. Es para ella, la única forma de vivir.


Comments


Los trabajos firmados son de responsabilidad de los autores. Esta página web se realiza con fines absolutamente educativos.

logo (2)kkk-02.png

UBÍCANOS

Avenida Javier Prado Este N.° 4600
Urbanización Fundo Monterrico Chico
Distrito de Santiago de Surco 
Provincia y Departamento de Lima

© Universidad de Lima, 2019

Todos los derechos reservados

LOGO_HORIZONTAL_600x300-04.png
bottom of page