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"El callejón de las almas perdidas" (2021): monstruos, charlatanes y otros trucos

Actualizado: 19 jun 2023

La reciente cinta de Guillermo del Toro es un thriller psicológico con tintes de cine noir. Es una adaptación de la novela, del mismo nombre, de William Lindsay Gresham, la cual también fue adaptada en el largometraje de Edmund Goulding, en 1947. La película protagonizada por Bradley Cooper está nominada a mejor película en los premios Oscar 2022.


Por Hitoshi Isa Kohatsu CRÍTICAS / CARTELERA COMERCIAL

"El callejón de las almas perdidas" (2021). Fuente: Searchlight Pictures
"El callejón de las almas perdidas" (2021). Fuente: Searchlight Pictures

1939. Un hombre llamado Stanton (Bradley Cooper) le prende fuego a un cadáver y una casa. Huyendo de la escena, llega a un circo ambulante manejado por un cruel manipulador (William Dafoe), quien le ofrece un trabajo. En este circo conoce a una pareja (Toni Collete y David Strathairn), que le enseñan trucos de mentalista, y a Molly (Rooney Mara), una joven de quien se enamora. Utilizando aquellas técnicas, Stanton consigue éxito en Nueva York dos años después. Sin embargo, su codicia puede más. Con la ayuda de una psicóloga llamada Lilith (Cate Blanchett), decide aparentar ser un médium para estafar a personas adineradas.


A diferencia de las anteriores películas del director, El callejón de las almas perdidas (Nightmare Alley, 2021) carece de cualquier elemento sobrenatural. Se concentra en el desarrollo psicológico de sus personajes, pero desgraciadamente no alcanza para que estos sean interesantes. La narrativa se acerca a los vínculos complejos de los personajes en una lenta y meticulosa revelación, posiblemente muy lenta, pues se ha de admitir que hay escenas agobiantes que transcurren más tiempo de lo tolerable. Dichas relaciones están, más que todo, basadas en clichés, y uno siente que no son más que insertos artificiales del guion para crear algún sentido de tragedia. Puede que esto se deba a cierta debilidad en los personajes, que realmente no tienen la profundidad emocional que demandaría una película como ésta.


Las anteriores cintas del realizador mexicano utilizaban los elementos fantásticos como reflejos o proyecciones de los abusos humanos. No es una exageración decir que en el mundo de Guillermo del Toro los monstruos son metáforas de la naturaleza humana. Pero, aquí los temas se abordan de una forma más explícita, menos sutil. Ello deja menos espacio para la interpretación y desemboca en una trama desarrollada sin mayor atractivo.

"El callejón de las almas perdidas" (2021). Fuente: Searchlight Pictures
"El callejón de las almas perdidas" (2021). Fuente: Searchlight Pictures

La manera en que nos vemos a nosotros mismos, y cómo proyectamos nuestras inseguridades en otros y las explotamos cruelmente por dinero, pasión y orgullo, es un asunto que se plasma en la película sin los atrevimientos o los imaginativos recursos que hemos pedido apreciar en muchas de las películas previas del director. Los sucesos se van contando de modo casi ilustrativo.


A pesar de ello, el largometraje es una maravilla visual. Puede que sea un tanto redundante mencionarlo en una producción dirigida por Guillermo del Toro, pero la dirección de arte es probablemente el punto alto de la experiencia de ver este filme. Por un lado, las cualidades grotescas y las texturas monstruosas del circo; por otro, la ciudad de Nueva York, que aquí es una fusión del hermoso art déco y callejones lóbregos que recuerdan algunos espacios del film noir.


El callejón de las almas pérdidas termina siendo una decepción. Sin embargo, esa manera singular de retratar los espacios, que acaso sí logran transmitir con fuerza ese halo de monstruosidad de algunos personajes, es lo que evoca los mejores momentos del cine de Guillermo del Toro.





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