top of page

“Antiquities” (2018): en el nombre del padre

Actualizado: 11 nov 2022

Esta comedia norteamericana de Daniel Campbell está disponible en iTunes y otras plataformas. Hurga en las relaciones familiares de sus personajes de un modo cómico y honesto.


Por Sebastián Zavala Kahn CRÍTICAS /VIDEO ON DEMAND

Fuente: The Movie Database


Puede que suene como una gran simplificación, pero se puede argumentar que la mayoría de historias pueden dividirse en dos categorías: aquellas en donde el protagonista tiene que pelear con un obstáculo externo, y aquellas en donde el conflicto es más bien interno. Antiquities pertenece a la segunda clasificación. Sorprendentemente emotiva y a veces entrañable, la película cuenta una historia (por momentos) familiar, la cual, a pesar de un ritmo lento por momentos, se convierte en algo un poco más honesto y menos previsible. No se trata de una pieza de arte revolucionaria, y aunque utiliza algunos de los mismos recursos que otras películas más conocidas, al final, está lo suficientemente bien actuada y dirigida como para no sentirse como un pastiche. Antiquities es una cinta simple y sincera que a pesar de sus defectos, termina ganándose a su público.

El protagonista del filme es Walt, interpretado por Andrew J. West. Su padre acaba de morir, y dispuesto a conocer un poco más a un hombre sobre el que supo muy poco mientras vivía, se muda a la casa de sus familiares, en un pueblo americano algo pequeño y estereotípico. Ahí, se involucra en el negocio de su papá (una tienda de antigüedades), y conoce a Elle (Ashley Greene, más conocida por las películas de Crepúsculo) quien, a pesar de ser muy enérgica e incluso a veces algo desesperante, está pasando por una etapa algo complicada. Lo cual quiere decir, por supuesto, que ambos terminan enamorándose, mientras Walt sigue descubriendo cosas sobre su padre, y como se deben imaginar, también sobre sí mismo.

Antiquities es un intrigante estudio de personaje, una película que se concentra en la manera en que Walt va conociendo a su fallecido a padre, y la manera en que su personalidad, sus objetivos y hasta su trabajo, afectaron su crianza. Es un filme que tiene mucho que decir sobre las relaciones entre padres e hijos, y la manera en que la falta de comunicación y afecto puede destruir dichas relaciones. Resulta fascinante ver cómo la percepción que tenía Walt de su padre va cambiando, y aunque algunas de las revelaciones más chocantes no son presentadas de manera muy sutil que digamos, al menos cumplen su propósito; ayudan a desarrollar la narrativa, y más importante incluso, a desarrollar el personaje de Walter, ayudándolo a cambiar y, con algo de suerte, madurar.

Fuente: Mubi


West está bastante bien como Walt, interpretándolo como el hombre sobrio en un pueblo lleno de personajes algo excéntricos y hasta caricaturescos. Uno llega a darse cuenta de por qué necesita saber más sobre su padre, y por qué cree que dicho objetivo lo ayudará a conocerse a sí mismo. Es una actuación sutil, que eleva a una historia previsible, la convierte en algo más interesante, Como Ellie, Ashley Greene es igual de convincente —sí, su personaje es un poquito desesperante al principio, pero la manera en que los guionistas, Graham Gordy y Daniel Campbell (el segundo también es el director), logran humanizarla gradualmente, desarrollándola como una figura ligeramente trágica, es genial. Se complementa muy bien con Walt, incluso considerando que le hubiera podido bajar la intensidad a algunas de sus escenas más “enérgicas”.

De hecho, uno de los mayores logros de Antiquities es la manera en que desarrolla a la mayoría de sus personajes (incluso a los más pequeños). Todos tienen un arco de personaje, comenzando como arquetipos graciosos y excéntricos, y terminando la historia como individuos más tridimensionales. Michaela Watkins es memorable como la siempre confundida Dolores Jr; el Delaney de Michael Gladis es el patán perfecto (no hay otra manera de describirlo), y Mary Steenburger (sí, la de Volver al Futuro III) es extraordinaria como la Dra. Margot, por más que le hubiesen podido dar más que hacer. A pesar de que Antiquities se concentra principalmente en Walt y Ellie (y en su romance), sus personajes secundarios definitivamente ayudan a que la película se sienta más especial y ambiciosa.

Sin embargo, también se puede decir que, a pesar de sus grandes protagonistas y varias escenas de desarrollo de personaje eficiente, la película tiene una tendencia a divagar, especialmente durante el segundo acto. Entiendo que los personajes deben ser introducidos, el conflicto tiene que ser establecido, y las revelaciones del pasado se deben llevar a cabo, pero estoy seguro que el filme hubiera podido tener un ritmo un poco más enérgico, especialmente para que el espectador pueda llegar a la parte más interesante de la historia sin poner a prueba su paciencia. Después de todo, a pesar de que los dos primeros actos no son tediosos, necesariamente, es durante el tercero que Antiquities realmente logra conectar emocionalmente con el espectador. Es el tipo de película que comienza de manera algo irregular, pero que va mejorando minuto a minuto, culminando de manera innegablemente potente, con eventos que, finalmente, obligan a Walt a que crezca como persona.

Fuente: IMDb


Antiquities se demora en demostrar sus verdaderas virtudes, pero una vez que lo hace, estoy seguro que la mayoría de espectadores se habrán relacionado lo suficiente con los personajes como para que desarrollen una conexión emocional con la historia. Sí, el ritmo hubiera podido ser mejor, y sí, algunos de los aspectos de la narrativa podrían haber sido más sutiles, pero a pesar de estos defectos, Antiquities es suficientemente honesta y verosímil como para que uno la disfrute sin mayores problemas. No tiene nada particularmente novedoso para decir, pero sus temas —sobre relaciones entre padres e hijos, la familia, el romance y la madurez— son transmitidos de una manera refrescante y franca. Antiquities no es el mejor drama familiar que jamás haya visto, pero si uno tiene paciencia, definitivamente lo disfrutará.






bottom of page